Aspectos a tener en cuenta a la hora de seleccionar un bozal para tu perro
El bozal
La idea de poner un bozal a un perro, nunca es gratificante e incluso puede ser polémica, pero en un momento u otro nos podemos encontrar una situación en la que necesitamos utilizarlo como puede ser por la seguridad del perro, la seguridad de una persona, porque las ordenanzas así lo indican (viajar en transporte público, perros potencialmente peligrosos …)
A la hora de elegir un bozal debemos asegurarnos del bienestar del perro, que encaje correctamente y que sea efectivo (imposibilidad de morder), para ello debemos tener en cuenta:
• El bozal no debe provocar rozaduras que provoquen lesiones.
• Que no pese mucho.
• Que tenga la posibilidad de jadear bien sea por estrés o por calor (jadear es la versión canina de la sudoración).
• Que pueda abrir la boca bostezar, coger premios, beber.
¿Cuándo es apropiado utilizar el bozal?
• Emergencias (un perro lesionado puede mordernos por dolor o por miedo).
• Cuándo se encuentra en una situación amenazante.
• Si ha tenido conductas agresivas y ha mordido a otros perros o personas en el pasado.
• Cuando la legislación nos obliga (desafortunadamente hay una legislación específica para perros considerados “potencialmente peligrosos”).
¿Cuándo NO es apropiado utilizar el bozal?
• En las que el perro ladre
• En la que el perro muerda, destroce o coma objetos
• Otros problemas de conducta no relacionados con la agresividad.
El ladrido, morder objetos es una conducta intrínseca, es decir una conducta propia de los perros, con lo cual la solución no pasa por poner un bozal, ni sustituye a una modificación de conducta.
Si un perro ladra excesivamente, seguro que hay una razón como puede ser un problema de Ansiedad por separación, aburrimiento, alarma ante un peligro, demanda de atención …, estos problemas deben ser analizados y tratados por un especialista en comportamiento canino.
Lo mismo pasaría con conductas destructivas o que coma cosas no comestibles. Además, nunca se debe utilizar un bozal como castigo ya que esto no va a solucionar el problema subyacente y hará que su perro tenga miedo y ansiedad cuando trate de ponérselo.
¿Tipos de bozal
En el mercado nos encontramos con muchos tipos y diseños de bozal, pero no todos ellos son recomendables, incluso algunos de estos bozales están prohibidos en muchos países.
En Barcelona por ejemplo, la ordenanza municipal sobre la tenencia de animales de compañía en su artículo quinto dice:
“Los bozales deben ser de cesta, para permitir al perro abrir la boca, pero cerrados por delante con reja para impedir la mordedura. Se prohíben los bozales que impiden al perro abrir la boca en su interior.
Básicamente los bozales se pueden dividir en dos tipos, los de cesta y los de tela, nailon, cuero.
Bozal de cesta: puede parecer la opción más “fea” porque el perro puede parecer más agresivo, pero dependiendo del estilo, protecciones y diseño, puede permitir que el perro pueda beber, jadear, bostezar, coger premios …
Con lo cual algunos de ellos son los más recomendables.
Bozal blando: están fabricados con tela, nailon, cuero o plástico, son menos cómodos, evitan que el perro pueda jadear, beber, coger premio, que pueda abrir la boca …
No son recomendables y hay modelos que están prohibidos en algunos países o ciudades.
Bozal casero: Solo recomendable para una emergencia como puede ser que el perro haya resultado herido y existe riesgo de mordedura, solo debe utilizarse durante el traslado al centro veterinario.
Cómo hacer un bozal casero de emergencia:
¿Cómo enseñar a un perro a llevar el bozal de forma agradable?
La primera vez que tengamos que poner un bozal, no debe ser la primera vez que necesitemos utilizarlo.
Si la primera vez que utilizamos un bozal es cuando el perro se encuentra herido o en una situación de estrés, será mucho más difícil, es por ello que debemos enseñarle a llevarlo en momentos que esté tranquilo y paso a paso.
En el siguiente enlace se pueden ver los pasos que debemos seguir para asociar el bozal como algo positivo.
https://www.youtube.com/watch?v=6BjPpXer8IE
Si su perro presenta problemas de conducta, es recomendable ponerse en manos de un profesional (Adiestrador, Educador Canino, Etólogo).
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[:ca]La idea de posar un morrió a un gos, mai és gratificant i fins i tot pot ser polèmica, però en un moment o altre ens podem trobar una situació en què necessitem utilitzar-lo com pot ser per la seguretat del gos, la seguretat d’una persona, perquè les ordenances així ho indiquen (viatjar en transport públic, gossos potencialment perillosos …)